miércoles, 24 de febrero de 2010

Nostálgica noche de un día feliz

Un joven corazón apasionado puede ser capaz de crear un exquisito delirio lleno de deseo, despojando a su dueño de toda preocupación que no sea la de amar. Centra su atención en cada palabra, cada caricia y cada beso; porque el mas mínimo detalle es relevante para un buen amante. Solo vive para complacer un fuerte sentimiento. El fogoso disfrute de esa grata compañía tan esperada es indispensable. Su lugar de alojamiento no es mas que un medio para transmitir su lenguaje único repleto de deseo.

Es agradable mantener esa fiera llama encendida.

Fin de la reflexión.


"Una ninfa correteaba semidesnuda solo porque se sintió libre , con ese acto alegró a una de sus hermanas de forma un tanto inconsciente. ¿Quién diría que agujas, alfileres e hilos eran capaces de crear un mundo entero? ¿Quién diría que un momento efímero puede albergar felicidad plena?. ¡Oh, que fortuna!"

Ella lo pensó entre los gritos de amargura de la gran dama, y yo lo escribí para que el recuerdo perdure. ¡Alejaos de mi mujer del mal! ¡Mis memorias no me las arrebatará!

Esta noche no se perderá.

domingo, 21 de febrero de 2010

La mecánica del corazón.

Oliver Nue (Le Figaro Magazine), describe este libro de Mathias Malzieu como "un cuento de acento gótico y clásico" y considero que son las palabras adecuadas. La estética de la portada va acorde con la forma de escritura adornada que caracteriza al relato. Lo estoy comenzando y ha logrado atraparme. Definitivamente fue un un regalo ideal de San Valentín.

Sinópsis: "Jack nace con un corazón dañado y por eso necesitará reemplazarlo por un reloj de madera al que habrá de dar cuerda toda su vida. Para que funcione correctamente debe respetar una regla: evitar todo tipo de emoción fuerte que pueda alterar su débil corazón, por lo tanto no podrá enamorarse jamás."

Es prudente mencionar unas citas del libro:

"Recuerda que tu corazón no es mas que una prótesis, es infinitamente mas frágil que un corazón normal, y me temo que siempre va a ser así ... el amor es demasiado peligroso para tí".

"Cuanto mas intensamente ames, más intenso será el dolor futuro. Conocerás la angustia de los celos, de la incomprensión, la sensación de rechazo y de injusticia. Sentirás el frío hasta en tus huesos, y tu sangre formará cubitos de hielo que notarás correr bajo tu piel. La mecánica de tu corazón explotará. No es lo bastante sólido para soportar los pesares del amor" Madeleine.

Con estas breves líneas se puede comprender hacia dónde va la historia, mas la narrativa intensa impulsa al lector a continuar con la siguiente página.

Quizás cuando lo termine, en un futuro increiblemente cercano, exprese una opinión más veráz. Dulces sueños, yo iré a leer.

miércoles, 17 de febrero de 2010

La flor del jardinero

Comenzar de nuevo nunca es fácil, en lugar de pensar en ello y hacer una introducción a mi nuevo espacio, me limitaré a contar la historia de aquel jardinero:

Durante su vida cultivó muchas flores de toda clase, más lo único que anhelaba, era encontrar una sola a la cual dedicar su entera disposición. Pasó el tiempo y ninguna cumplía con su amplia lista de cualidades requeridas. El hombre frustrado intentó abandonar su gran empeño por hallar esa planta soñada: trató de distraerse por todos los medios posibles y centrar su atención en una de las flores que ya había cultivado; varias lograron captar su interés, pero ninguna fue lo suficientemente cautivadora para mantenerle calmado.

Un día el hombre fijó su vista en una hermosa rosa blanca a la que nunca antes miró por ser mas pequeña que las otras. No pudo evitar terminar encantado con la simple belleza que se apreciaba en sus delicados pétalos y la sutileza con la que cada gota de rocío parecía brillar hermosamente en sus minúsculas hojas.

El jardinero por fin obtuvo lo que tanto deseaba. Dedicó la mayor parte de su tiempo al cuidado de su Rosa Blanca, le cantaba con dulzura, la regaba suavemente, la miraba con cariño y la abonaba con esmero. No hubo día en que el hombre no se ocupara de su protegida.

Un año después, el jardinero dejó de encargarse de su adorada planta y ese descuido la comenzó a destruir. Aquel señor, olvidó que esa flor era su razón de vida, porque al tenerla consigo se desvaneció el recuerdo de lo mucho que sufrió esperándola antes de su llegada. Siendo ser humano por naturaleza, no sintió la necesidad de darle un bello trato para mantenerla en pié, simplemente daba por sentado que le pertenecía.

Fue así como a la indefensa florecilla le crecieron espinas protectoras, y estando resentida, lastimó a esa persona que anteriormente la cuidó tanto. Quizás el dolor posterior a la herida ocasionada, fue lo que llevó al jardinero a empeorar su trato. Inevitablemente la linda rosa comenzó a marchitarse.

Con suerte, el hombre comprenderá antes de que sea demasiado tarde que apartó de su lado a su única, preciosa y fiel compañera; o tal vez, será el último en darse cuenta de cuanto necesitaba a su amada Rosa Blanca en el momento en que ésta se marchite completamente.

Clara enseñanza. Iré a cuidar mi flor...