viernes, 22 de octubre de 2010

Luna llena.

Esta noche hay una llena. Ninguna superstición, para quien lo haya pensado. Es sólo un hecho veraz, contundente, real, cierto. Brilla esplendorosamente en la oscuridad nocturna. Mi agenda ya lo había anunciado, pero de igual manera me tomó por sorpresa. Ya hubo algunas consecuencias, espero que hayan sido suficientes.

Me hace recordar, anhelar más. Por supuesto, todo lo inalcanzable, aquello alejado de mi entendimiento.

No es sabiduría, eso sería pedir demasiado. Es en cambio, una visión, una pequeña contemplación. Una petición confusa, nadie la entenderá. Eso me hace sonreír aliviada y volverme para seguir observándola.

No hay comentarios: